Nos planteamos que había un serio desconocimiento de los problemas que viven cada día estas personas y por tanto la tramitación de la ley ha sido positiva, porque hemos participado activamente en el debate y contribuido a acabar con la invisibilidad del colectivo, con el castigo que muchas veces se les ha impuesto, con el conformismo de una sociedad que no se ha atrevido nunca a cambiar las cosas. Con esta ley, reglamentariamente se establecerá el procedimiento para que todas las personas transexuales puedan ser atendidas en Andalucía conforme a su identidad de género, sin establecer un carné o documentación como persona transexual. Además, se incorporan protocolos en defensa de los menores, y se establece una evaluación cada dos años de la ley. Alrededor de una veintena de representantes del colectivo de transexuales asistieron al ebate final y creo que ha sido uno de los pocos ejemplos en los que todos los grupos políticos presentes en la Cámara en Andalucía hemos votado a favor. 

Los próximos pasos por tanto deben ser reclamar al gobierno andaluz que garantice el cumplimiento de esta ley, y desdeluego, permanecer en contacto con este colectivo para seguir caminando en la conquista de la igualdad de derechos y oportunidades en la que creo firmemente.