En primer lugar somos partidarios de mejorar las condiciones y requisitos  para acceder a la jubilación, situándolos como mínimo en la situación previa a la última reforma que se realizó en el año 2011.

Por lo tanto somos partidarios tanto de adelantar la edad ordinaria de jubilación tendiendo hacía los sesenta años como edad ordinaria de manera progresiva, anulando desde luego el aumento progresivo de los 65 a los 67 de la actual legislación,  y recuperar los 35 años cotizados para acceder al 100% de la pensión, tendiendo a reducirlos también.

Dicho esto, no veo mal que el número de años cotizados esté vinculado a los diferentes coeficientes reductores posibilitando que  a más años cotizados menor sea la reducción de la pensión en caso de jubilaciones anticipadas. Incluso llegando a un umbral en el que ya no hubiera coeficiente reductor, que podría ser perfectamente los 40 años cotizados como usted propone.

En cualquier caso, en mi opinión deberíamos tender a reducir la edad de jubilación ordinaria  (voluntaria) con menores requisitos de años cotizados para hacerlo al 100% para garantizar unas mejores condiciones de jubilación a toda la clase trabajadora. Y hacerlo desarrollando una política de empleo que garantice los ingresos necesarios para mantener el sistema de pensiones. En dicha situación, las jubilaciones anticipadas se reducirían de manera significativa al poder realizarse jubilaciones en una edad razonable sin reducciones en la pensión ordinaria.