Residuos transformados en energía frente a vertederos
Eskerrik asko Dorleta, agradezco tu interés.
Antes de nada, quisiera matizarte que cualquier objeto o sistema, no adquiere el calificativo de ventajoso o desventajoso por sí misma, sino cuando se establece una comparación con otro elemento de similares características. En este caso, podríamos considerar la incineración como un “sistema de cierre” del proceso del tratamiento de los residuos, como lo puede ser el sistema de vertederos. Por ello, intentaré resumirte brevemente algunas ventajas y desventajas entre ambos sistemas.
Los propios datos de la Unión Europea y de países punteros en reducción, reutilización y reciclaje de residuos como Alemania, Suiza, Dinamarca y Suecia, demuestran que la posibilidad quimérica de llegar al “Residuo 0”, como pretende Bildu, es una hipótesis irreal. Los residuos no reciclables no se evaporan. En cualquier ámbito de recogida y gestión hay una fracción resto con la que es necesario cerrar el ciclo de su tratamiento. ¿Qué pasa con esa fracción que no se puede reciclar?
Los vertederos son cajas negras con procesos biológicos y químicos incontrolados. Necesitan cuidados intensivos durante generaciones, el agua de lixiviación tiene que tratarse durante años. Peligro permanente de fugas y emisiones, con gran impacto en las aguas subterráneas, terreno, atmósfera y entorno natural. Normalmente, estos problemas no tienen solución. Es cierto que en los vertederos existentes la captura/recuperación del metano ha sido una práctica habitual, pero en ningún caso justificado por los datos (la obtención de metano no llega al %50), ni por los altos costes de seguridad. Las normativas específicas impiden la apertura de nuevos vertederos, no es un sistema de futuro.
Sobre la incineración, destacaría que es una tecnología probada y perfeccionada durante muchos años, y cuando se plantean instalaciones con la tecnología más avanzada disponible, se obtiene un impacto medioambiental muy bajo (que los vertederos difícilmente pueden igualar). Se consigue alta eficiencia en la recuperación de calor y electricidad (valorización energética). No se producen sustancias nocivas o metales pesados, las emisiones son muy bajas. Las cenizas resultantes son reutilizables en la industria de la construcción o no requieren de apertura de nuevos vertederos. Por último, el alto nivel de fiabilidad que ofrece el sistema.
En conclusión, comparando las ventajas/desventajas que ofrecen ambos procesos, queda claro que debemos apostar por la valorización energética, en línea con lo que están haciendo los países más avanzados en temas medioambientales. ¿Qué significa esto? Generar energía mediante la incineración de aquellos residuos que no pueden ser reciclados ni compostados. El vertedero, la apuesta y propuesta de Bildu, es el pasado.
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