Hola Manuel. Muchas gracias por interesarte por nuestra propuesta federal. No se trata de considerar que el Estado autonómico es malo. Al contrario. Es un modelo que ha funcionado y funcionado muy bien, que ha contribuido a la prosperidad de los españoles y ha servido para que todas las partes de España tengan buenos servicios públicos y prestaciones de calidad. Por tanto, nuestro modelo federal no pretende acabar con los avances conseguidos gracias al Estado autonómico, sino corregir sus imperfecciones y, sobre todo, dar respuesta a algunos problemas que no se cerraron bien durante la Transición. 

España no es un conjunto de Estados independientes, pero sí es un país plural, con diversos sentimientos y sensibilidades que son todas perfectamente compatibles en un marco común de convivencia y entendimiento. Por desgracia, en los últimos años se han avivado las tensiones por culpa de Gobiernos que no han querido comprender la diversidad y pluralidad cultural y social de España. Esto ha provocado que se haya producido una fractura que se debe cerrar. Y ello solo pasa por el diálogo y por fórmulas como la federal, que permitan mejorar la convivencia entre españoles y fortalecer nuestra unión ciudadana.

Nuestra propuesta de reforma es una oferta abierta, llamada a completarse y discutirse con las que formulen el resto de los actores políticos y también la propia ciudadanía. Queremos analizar todas ellas, discutirlas, buscar los puntos de convergencia, precisarlas y concluir con un acuerdo final ampliamente mayoritario, especialmente cuando alguna de ellas requiere el procedimiento agravado de reforma constitucional.

Algunas de las propuestas que planteamos no son incompatibles con ese Estado autonómico. Más bien al contrario, lo refuerzan. Por ejemplo, la reforma del Senado para convertirlo en una auténtica Cámara territorial. O incluir el principio de lealtad federal entre el Estado y las Comunidades Autónomas. Impulsar los instrumentos de colaboración y cooperación entre administraciones. Otra propuesta es racionalizar, clarificar y completar el sistema de distribución competencial, incluyendo la delimitación, al máximo posible, de los ámbitos respectivos en las competencias compartidas y enunciando de manera precisa los títulos competenciales de carácter horizontal del Estado.

Como ves, un proyecto ambicioso que requiere del consenso y que no pretende, en ningún caso, cuestionar ninguno de los logros conseguidos hasta ahora. 

Un saludo.