Muchas gracias por su pregunta, que es la primera -espero que de muchas- que recibo a través de Osoigo.

Si hay una Comunidad Autónoma que necesita acciones como ésta, es Canarias. Aquí tenemos una tasa de pobreza infantil del 40%, la mayor de España, también una de las mayores tasas de paro de toda Europa con un 33%. Por lo tanto, lo lógico es que el Gobierno de Canarias ponga en marcha mecanismos que ayuden a paliar esta situación.

Sin embargo, el año pasado esta medida se puso en marcha sin contar con los Ayuntamientos ni con la comunidad educativa por lo que generó mucha controversia.

El propio Gobierno de Canarias reconoce, en la evaluación del curso pasado,  que hay que mejorar la organización y planificación. Fíjese que hubo un 39% de absentismo, es decir, familias que dejaron de llevar a sus hijos al comedor de verano.

En principio el Gobierno solo iba a dar almuerzos en los comedores escolares, pero la presión social hizo que además pusiese en marcha un programa de inmersión lingüística. Este año, además, incluyen actividades deportivas. Esto es algo que desde el Partido Popular siempre hemos dicho: la medida no puede limitarse sólo a dar de comer a los niños, hay que hacer actividades con ellos.

Creo que es bueno, además, que se incorporen más actividades dentro de este programa, como por ejemplo actividades físicas que promuevan hábitos de vida saludable.

Pero, tienen que haber más medidas a parte de los comedores escolares de verano. El Gobierno de Canarias propuso hace un año una Estrategia para luchar contra la exclusión social que solo incluía la apertura de comedores escolares, y una reforma de la Prestación Canaria de Inserción (PCI) que endurece el acceso a una ayuda, y que sólo atiende a 6.000 de las casi 140.000 familias que lo pasan muy mal en las islas.

En cualquier caso, cada vez hay más comunidades autónomas que abren sus comedores en verano o ponen en marcha programas a través de Ayuntamientos para ayudar a las familias. Si bien es verdad que cada comunidad tiene su realidad. Es decir, esta medida es más necesaria en Canarias que, por ejemplo, en Madrid, porque la realidad socioeconómica es distinta.

En definitiva, creo que la clave está en diseñar un conjunto de actividades, no solo el comedor, y hacerlo en coordinación con los Ayuntamientos que conocen la realidad de su municipio. Tenemos una importante red de centros educativos que en verano cierran sus puertas y creo que debemos aprovechar esa infraestructura para hacer actividades.