Muchas de las soluciones de futuro de Granada las encontramos en su pasado no muy lejano. Tranvías y Vega, por ejemplo. Al pensar en lo que fue su desmantelamiento o su abandono tenemos que cambiar la pena por la certeza de que si fue, podrá ser de nuevo. Pero ojo, seamos conscientes de que no será de un día para otro, hay inversiones recién hechas – metro, LAC, etc – que aún no están ni terminadas ni amortizadas. Deberemos primero de auditar dichas inversiones para ver cuanto dinero van a costar realmente y como podemos hacerlas viables y adecuadas a las necesidades de Granada.

Así pues, tenemos que ir con un ojo puesto en el horizonte para acercarlo, y  otro en la siguiente baldosa para no tropezarnos. Nosotros siempre miraremos por hacer más sostenible la ciudad y crear un plan de movilidad de proximidad que fomente el transporte público y reduzca la contaminación: atmosférica, lumínica y acústica. 

Muchas gracias Alberto.