Respetar, no elegir
Hola Hussein, perdona el retraso. No tengo un criterio personal para "preferir" regímenes políticos vinculados a doctrinas religiosas. En mi opinión la existencia de regímenes políticos confesionales es un a aproximación arcaica a la política y los asuntos públicos. Por tanto, reduzco la cuestión a sus términos (digamos) civiles. Las relaciones lo serán con países o gobiernos y en base a sus actuaciones y no a sus doctrinas religiosas inspiradoras. Es decir, mi profundo rechazo al tratamiento de la mujer en buena parte del islam no es una posición religiosa, sino ideológica, política. Me da igual que el origen de la discriminacion sea religiosa. Mi juicio no lo es oponiendo otra doctrina islamica ni mucho menos cristiana, sino racional, ideológica. Por tanto, no "prefiero" chiíes a suníes, para mí son categorías ajenas a mi raciocinio. Prefiero a los que respetan el marco internacional de derechos humanos y rechazó a los que lo violan. En cuanto a la prensa española, ignoro las causas de esa inclinación que usted detecta y en la que yo no había reparado en esos términos.
Partekatu
Batu zaitez Osoigora