Pienso que es un término equívoco, pues tras él se encuentran aspectos, situaciones y actitudes muy diferentes.Yo estoy en contra del encarnizamiento terapéutico pues creo que ese alargamiento artificial e inhumano de la vida no respeta la dignidad de la persona. Creo que el derecho a morir dignamente pasa por un reforzamiento de los cuidados paliativos para atender a las personas dándoles apoyo médico, farmacológico, psicológico y humano en fase terminal.

Creo que hoy en día, con la disculpa de la crisis económica, en vez de reforzar esos servicios de cuidados paliativos en la sanidad pública, les están aplicando los recortes en mayor medida si cabe.

Este derecho a morir dignamente pasa por hacer desaparecer ese planteamiento neocapitalista, que plantea la sanidad pública desde una concepción economicista en términos de costo exclusivamente, que prima la rotación de las camas ocupadas, y reducir las estancias en los centros hospitalarios, frente al cuidado de una persona a la que ya no se considera "útil" para la sociedad. Para este planteamiento prima el prescindir de los cuidados paliativos y los medios ordinarios de atención médica sobre el derecho de la persona a morir con dignidad.

Para los planteamientos neocapitalistas los derechos de las personas, el respeto a su dignidad, nunca son "rentables". Yo en este tema, y en todos, pienso que la dignidad de la persona, sus derechos, estan por encima de cualquier consideración económica.