Me gustaría plantear una contrapregunta para hacer más clara la respuesta: ¿cómo conjugar el consumo y las políticas expansivas y keynesianas con un planeta finito? ¿cómo conjugar el consumo y las políticas expansivas y keynesianas cuando en la actualidad se necesitarían 3 planetas si todo el mundo consumiera como España?

Una economía expansiva y basada en el consumo está bastante lejos de poder garantizar los derechos de las personas y la sostenibilidad de nuestra vida. El decrecimiento lo que busca es precisamente garantizar esa sostenibilidad. Sin embargo, para ello no propone decrecer en todo, sino precisamente en aquello que nos sitúa por encima de los límites físicos del planeta, como por ejemplo, la utilización desmesurada del coche para el transporte (el transporte, en su conjunto, consume el 80% del petróleo producido en el mundo - y el petróleo representa el 95% de la energía utilizada en el transporte). Por este motivo, el decrecimiento sí estaría a favor de crecer en sectores como transporte sostenible (tren, autobús, bicicleta, etc.), energías renovables, en la economía social y solidaria, etc.

Y es precisamente en el crecimiento de esa economía social y solidaria (ej. cooperativas) donde el decrecimiento se podría conjugar con las políticas expansivas y keynesianas de los partidos de izquierda.