¿La medicina en el medio rural?
Ezequiel, muchas gracias por apoyar este proyecto y hacer que esto funcione!!
Tú estas realizando una labor encomiable en Biota. Espero que la moción del grupo socialista aprobada por unanimidad, en la que se solicita al Ministerio de Sanidad explicaciones por los recortes en los horarios de atención sanitaria de los dos profesionales (médico y ATS) que atienden el consultorio, tenga éxito.
No es normal que si vuestro médico no puede ir al consultorio, médicos de otros pueblos tengan que acudir y hacerse cargo en tiempo record de las consultas de ese día. Basta ya de recortes!!
Los socialistas defendemos una sanidad pública, universal, gratuita en el acceso, equitativa y de calidad, con medidas que permitan una buena gestión y la generación de ahorros sin recortar derechos ni prestaciones y sin copagos.
El Gobierno del Partido Popular ha utilizado la crisis como excusa para imponer unilateralmente una reforma sanitaria que supone un cambio de modelo y la ruptura del consenso sobre la configuración de nuestro Sistema Nacional de Salud, que ha sido rechazado por todos los profesionales y partidos políticos.
Desde que el PP llegó a La Moncloa, la sanidad en España ha dejado de ser universal, está dejando de ser gratuita y cada vez es menos pública, demostrando que nunca ha creído en el Estado de Bienestar al considerar la sanidad como un negocio y no como un servicio social básico.
España ha logrado poner en pie un Sistema Nacional de Salud (SNS) público y ampliamente descentralizado, de cobertura universal, financiado por impuestos, con buenos indicadores de salud y de calidad asistencial, con una cartera amplia capaz de incorporar los avances y la innovación, orientado a la equidad. Un servicio público muy bien valorado por los españoles y reconocido internacionalmente por su accesibilidad, excelencia y eficiencia.
A pesar de alcanzar tan buenos parámetros en salud con un coste económico razonable, el Gobierno del Partido Popular ha querido hacernos creer que no hay alternativa a los recortes ni al copago para garantizar la sostenibilidad del SNS, utilizando la crisis como excusa para desmantelar el Estado de Bienestar.
La gran diferencia entre el PSOE y el PP es la concepción de la sanidad pública.
Mientras que para los socialistas la sanidad es un derecho ciudadano, un servicio público básico a proteger desde las instituciones públicas, para la derecha es un servicio susceptible de mercantilizar al considerar la sanidad como un negocio. De hecho, todas las medidas adoptadas por el Gobierno del PP han ido encaminadas en esa dirección.
El Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, ha supuesto un cambio radical en la esencia del modelo y la ruptura del consenso que existía hasta ese momento sobre la configuración de nuestro SNS. Por un lado, hemos pasado de un sistema de derechos a un sistema de aseguramiento, más parecido al que teníamos antes de la Ley General de Sanidad de 1986, alterando la vocación de universalidad del sistema y excluyendo del derecho a la asistencia sanitaria pública a los inmigrantes en situación irregular y a otros colectivos.
Posteriormente, a través de la Ley de PGE 2014, se excluye también a los españoles que pasen más de 90 días fuera de España, en el caso de que sean beneficiarios, asegurados pero hayan agotado sus prestaciones por desempleo o asegurados sin haber cotizado nunca y con ingresos inferiores a 100.000 euros anuales (jóvenes mayores de 26 años, por ej.)
Por otro lado, el RDL 16/2012 también ha introducido un sinfín de copagos y un ‘medicamentazo’ que perjudican sobre todo a los grupos más vulnerables, como enfermos crónicos, personas mayores y pacientes con enfermedades raras. Tras conocerse el dictamen del Consejo de Estado (enero 2014), que cuestionaba los supuestos ahorros del copago de las ambulancias, el Gobierno ha dado marcha atrás y ha renunciado a aplicarlo (junto al copago de las prótesis y los productos dietoterápicos). Pero sigue vigente el nuevo copago farmacéutico, incluido el copago hospitalario que no se está aplicando.
Además, las raíces del sector privado están cada vez más extendidas en la red sanitaria pública, sobre todo en las CCAA donde gobierna el PP. El Intento más claro ha sido el plan de privatización de la sanidad en Madrid al que finalmente han tenido que renunciar por el éxito colectivo de la “marea blanca”. A nivel de las CCAA, que son las que gestionan la sanidad, los recortes presupuestarios están teniendo efectos, por ejemplo, en el aumento de las listas de espera.
Los socialistas rechazamos absolutamente el fondo de esta reforma. Pero también somos muy críticos con las formas. Porque está siendo una auténtica chapuza jurídica, con cambios legislativos introducidos a última hora, a escondidas, en disposiciones de otras leyes que nada tienen que ver con la sanidad. Cambios que se imponen sin diálogo, ni debate. Sin información, ni explicaciones. Sin datos y sin haber evaluado el impacto en la salud de los ciudadanos, como exige la Ley de Salud Pública en vigor.
Estas son las propuestas y nuestro objetivo, en el momento que volvamos a Gobernar:
- Recuperar las características esenciales de nuestro modelo sanitario, es decir, una sanidad pública, universal, gratuita en el acceso y de calidad.
- Una sanidad universal entendida como derecho ciudadano fundamental, con una única cartera común de servicios para toda la ciudadanía (sin copagos) y con financiación suficiente y por impuestos: nuestro objetivo es invertir en sanidad pública un 7% de nuestro PIB en el horizonte de dos Legislaturas.
- Ganar en eficiencia y eficacia, a través de la adopción de una Ley de buen gobierno y gestión del SNS, reforzando la gobernanza y la cohesión del SNS y paralizando y revertiendo los actuales procesos de privatización de la gestión de hospitales y centros de salud públicos.
Muchas gracias Ezequiel y espero mas preguntas. Un abrazo.
Partekatu
Batu zaitez Osoigora